El Convento de San Agustín fue uno de los grandes conventos sevillanos durante la Edad Media y Moderna, fundado según Ortiz de Zúñiga ya en el siglo XIII, poco después de la conquista cristiana de la ciudad. Parece que se los religiosos se asentaron aquí ya a finales del mismo siglo y aquí permaneció la comunidad agustina hasta 1835, año en el que fueron exclaustrados.
Tras la expropiación del convento, el inmueble ha ido pasando por diversos usos y viendo reducidas poco a poco sus dimensiones originales. Han desaparecido la iglesia y uno de los claustros y hoy solo quedan algunas dependencias en torno al que fue claustro principal, todo en un estado ruinoso.
Aunque el convento tuvo una larga historia constructiva entre los siglos XIII y XIX, los restos del claustro que han llegado hasta nuestros días datan de finales del siglo XVI o principios del XVII. Se trata de un enorme claustro porticado, con arcos de medio punto sobre pilares de ladrillo en el primer piso y arcos carpaneles sobre columnas pareadas en el segundo. ´
En el centro del patio se encuentran los restos pétreos de lo que parece ser una gran puerta o arco triunfal, depositados allí tras ser desmontados de su emplazamiento original. Probablemente se trate de acceso al compás del convento que fue diseñado por el gran arquitecto del Renacimiento sevillano Hernán Ruiz II.
En la actualidad hay un proyecto para construir un hotel sobre los que queda del antiguo convento manteniendo las fachadas del claustro.